Maize seed
Why, sir, said the farmer, didn't you know? The wind picks up the pollen from the ripening corn and blows it from one field to another. If my neighbours grow inferior maize, the cross-pollination will constantly lower the quality of my maize. If I want to grow good maize, I'll have to help my neighbours grow good maize.
The same goes for our lives.... I recently read on a friend's social network that, "Those who want to live well and meaningfully must help enrich the lives of others, because the value of a life is measured by the lives it touches. And those who choose to be happy must help others to find happiness because the well-being of each is linked to the well-being of all."
Ever since I saw the Generali building on my way to university, coming out of Saint-Lazare station in Paris, or riding my scooter to work in the centre of Madrid, I have looked up at the acronyms on the imposing buildings that have stood for centuries, and dreamed of times gone by, with the music of Aida playing in the background, as new routes through the Suez Canal were inaugurated.
Until, in the world of work, I began to study Generali's co-insurance by heart, as a "follower" of the well-underwritten risks, and when my first policy with the Generali seal arrived, I was pleasantly surprised to discover that it enriches the lives of others, with actions to tackle the climate crisis we are living through, to care for people in disadvantaged situations, and many others. Working so that in 190 years' time the next generations will not have to emigrate to Mars for having contributed to the destruction of our planet, but will continue to accompany companies and people in a new step for humanity.
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Semilla de maíz
Había un agricultor que cultivaba maíz de excelente calidad. Cada año ganaba el premio al mejor maíz cultivado. Un año un periodista le entrevistó y descubrió que el agricultor compartía su semilla de maíz con sus vecinos. ¿Cómo puede permitirse el lujo de compartir su mejor semilla de maíz con sus vecinos cuando están compitiendo maíz con el suyo cada año? Preguntó el reportero.
¿Por qué señor?, dijo el granjero, ¿no lo sabía? El viento recoge el polen del maíz en maduración lo hace girar de un campo a otro. Si mis vecinos cultivan maíz inferior la polinización cruzada degradará constantemente la calidad de mi maíz. Si voy a cultivar un buen maíz, debo ayudar a mis vecinos a cultivar un buen maíz.
Lo mismo ocurre con nuestras vidas…. Leí recientemente en la red social de una amiga que, “Aquellos que quieren vivir bien y con sentido deben ayudar a enriquecer la vida de los demás, porque el valor de una vida se mide por las vidas que toca. Y aquellos que eligen ser felices deben ayudar a otros a encontrar la felicidad porque el bienestar de cada uno está ligado al bienestar de todos”.
Desde que iba en bici a la universidad y veía el edificio de Generali saliendo de la estación de Saint-Lazare en París, o en el centro de Madrid yendo a la oficina en patinete, miraba hacia arriba las siglas en los edificios imponentes que perduran desde siglos, soñando con épocas de expediciones marítimas pasadas con la música de Aida sonando de fondo, mientras se inauguran nuevas rutas por el Canal de Suez.
Hasta que empecé en el mundo laboral estudiando de memoria los coaseguros de Generali cual “follower” por los riesgos bien suscritos, y, llegó mi primera póliza suscrita con el sello de Generali, con la grata sorpresa al descubrir que enriquecen la vida de los demás con acciones por la crisis del cambio climático que vivimos, cuidando de las personas en situación desfavorable, y entre muchas otras. Trabajando para que las próximas generaciones, en 190 años más, no tengan que emigrar a Marte por haber contribuido a la destrucción de nuestro planeta, sino para seguir acompañando a las empresas y personas, en un nuevo paso de la humanidad.